Porque nuesro pueblo
te quiso adorar,
Torredonjimeno
se volvió un altar.
Sandalias de río
te puso el lugar,
y manto bordado
de verde olivar
de verde olivar.
Virgencita,
Madre buena,
un favor yo te quiero pedir:
que no olvides
cuando muera,
que yo vine a nacer junto ati.
Virgencita,
luz de cielo,
vela siempre por mi salvación,
y en mi cuita
dame tu consuelo.
José Mª Gallo.